El silencio tras la puerta.

Ha sido duro, el camino no ha terminado más que en el infinito.
Pero estás aquí.
Que no es poco.

Confuso, irritada, maravillado,loca, irreflexiva mentalidad sin tiempo.
Al final, en el lejano horizonte.
Somos algo más que polvo de estrellas.

Dejad pues, que con la valentía del más cobarde. Me tiré al vacío.
Conmigo llevo sólo el recuerdo, frágil colibrí.
Y ya, con ese equipaje, peso demasiado.

Dejad pues, que con la respiración floja y el corazón ahogado. Muera de nuevo.
Al final, en el sol naciente.
Se reunirán todas nuestras estelas.

Y yo, como tu, en mi estupidez supina y larga. Entiendo el fallo.
No ha sido en vano.
La caída en la locura.

Y yo, como tu, he tragado el dolor helado del desprecio ardiente.Solo.
Y como solo lo sufrí.
Sólo lo perdono.

Mas, que el pasado no enturbie nuestro ánimo. Ya queda poco.
Para comenzar el principio.
De la aventura.

Como en todas las cosas que importan. Al principio, reina el silencio.
Tras la puerta dorada.
Madera y oro tallado en otro mundo.

Dejad pues, seres terrenales, conscientes y mortales. Que caiga al cielo.
Al final, en la fría mañana.
Seré algo más que el invierno.

Dejad pues, criaturas infernales, aberraciones mentales. Que nazca de nuevo.
Al final, en la puerta de los mundos.
Seré ese pensamiento pasajero.

Y estará bien, que en este futuro, hable de mi al pasado. Como estoy haciendo.
Pues aunque no exista, imagino.
Que él habría querido, no ser olvidado.

Y estará bien, que en el eterno segundo. Vivas sin tiempo.
Pues aunque yazcas muerto, deduzco.
Que habrías querido ser amado.

Por ello, y con el corazón en cautiverio. Dejad que aproveche la guía del beso.
Dejad que rompa el espejo.
Y abra la puerta.

Y estará bien, que en ese pequeño segundo. Haya muerto de nuevo.
Porque significará que el paso infinito.
Es bastante pequeño.

Por ello, y con el cuerpo roto. La mente muerta se nubla con el silencio.
Que aguarda tras la misteriosa puerta.
Que yace en los sueños de otros mundos.

Al final, solo seré un segundo infinito.
En un campo invisible y fatuo.
pequeña vibración efímera.
Que danza tras la puerta.

Danza en el silencio...