El Vertedero del Poeta Loco

Y si nosotros no fumamos que más dará uno que otro. Me centraré más en comerte muy poquitito a poco. Por un momento soy el viento que acaricia tus poros. Dentro de mi arde un fuego que solo nos quema a nosotros. Habré de tener cuidado que mi corazón va loco. Empezaré por ese lado muy poquito a poco. Y dormirás en un sueño blanco Pensando solo en ti y en mí. Y seremos caballos blancos yo galopo junto a ti. Y si nosotros no follamos que más dará uno que otro. Me centraré más en catarte muy poquitito a poco. Y con la espera me desgasto porque esto ya es de locos. Esperaré el momento exacto para perderme en tus ojos. Será mejor tener cuidado que el corazón va loco. Haré fisión con un abrazo muy poquito a poco. Y dormirás en un sueño blanco Pensando solo en ti y en mi. Y seremos caballos blancos yo cabalgo junto a ti. Y si nosotros nos amamos que más dará uno que otro. Al fin y al cabo somos humanos todos estamos locos. Por un momento soy un cuerno que llama a la guerra. Parece que llegó el

 Hoy es un día oscuro. De esos que hacen que el asfalto llore. Por mucho calor que haga. Por mucho clima que cambie. Burbujea, pus negruzco salido de una oreo. Su masa blanca es materia gris. Gris como las nubes que el sol embate. Por mucha esperanza que tenga Por mucha grasa que trague. Al final en todas las mentes duerme un asesino. Se rasga el silencio con el trueno. Abortado de la de placenta de un tubo de escape. y por mucho que corra. Por mucho que, a mariposa, nade. El silo de dolor que sentimos es inmenso. Al final, todos. Declararemos la guerra lanzando misiles. Y por mucho que mientan. Por mucho que lloren. Este invierno nuclear lo pagarán los niños. Mientras, escudriña los ojos. Observa el punto en que se rompen los raíles. Y por mucho que admitan. Por mucho que rueguen. No les dejes entrar, gratis, en tus dominios. Lo oyes? Huele a aceite quemado. Pero nadie se atreve a hablar con los que llevan el restaurante. Por mucho que huela. Por mucho que grites. No llegarán a sacart