Cuesta abajo... hacia el cielo.2/4: Energía.

Y poco a poco, la vibración cesó.
Y las inquietudes se disolvieron en el viento del cuenco.
Solo hay lugar para la paz interior...
Puro, limpio, pensamiento sin rencor.
y entonces...
Entonces aparecieron los nobles.

El primer noble era un símbolo en forma de círculo.
La puerta, el camino sin camino, el inicio del inicio...
Algo extraño, cierto, pero todo estaba claro, solo había que dar el paso...
KuReiCho, invertido, extraño, poderoso, intenso, divertido... y puro.
No es placebo, de eso estoy seguro, ahora estoy abierto, ahora estoy despierto...
Y con toda certeza, puedo decirlo... es cierto.

Y con el primero, no hubo nada.
Y me quedé con una sensación que podría calificar como amarga...
Si tal cosa existiese en aquel momento...
y garantizo...
Que no lo hacía.

Sin embargo, algo era distinto, algo estaba cambiando.
Los engranajes internos se estaba recolocando...
como un vulgar reloj de bolsillo... En manos de un artesano habilidoso.
Pero hacía falta algo más, para notar el cambio...

Y llegó el segundo noble.

El segundo era similar a un silencio musical y cristalino.
Era sonido, era trueno, relámpago y millar de rayos.
Pero todo desde el silencio que revelaba su forma.
Todo desde los ojos de sabio que brotaban en su espalda...
Asomados de forma tímida, a ver que pasaba...

Y pasaba un entrometido humano.
Que pedía una audiencia con el trueno que retumba en silencio.
Que osadía, que descaro. Exhibe este sujeto.
Si así lo quiere, se lo daré si es digno...
Ajá, veo que ya ha despertado al primero...
Entonces, acepta mi regalo.

Y me tumbé temblando, aguardando a la nada.
Sin concebir, sin desear, en paz interna, sin más.
Y estalló en mí la energía pura, recorriendo mi cuerpo como una marea...
Inspiro, baja. Exhalo, sube. Inspiro, carga. Exhalo, fluye.

Y en ese momento, se quebraron todas las máscaras que podía haber...
Que hubo en algún momento, se quebraron en un grito que rebosó en puro júbilo.
Y llegaron los colores negros, los colores de mil formas, los colores en negro.
Tan extasiado me alzé.
que perdí el equilibrio
 y a la cama retorné.

Y tras incorporarme con esfuerzo...
Con el tiempo roto por mil lados...
Llegó el tercero de improviso...
para enlazar los pedazos.

Y su nombre es demasiado largo como para plasmarlo.
No dejaré constancia de ello por escrito.
Es demasiado extenso, casi tanto como su cometido...
Por ello, solo diré que es un cónclave unido.

Y su poder es estar en todo, y llevarlo a donde uno solo no es capaz.
Como lo hace? misterio. Solo se necesita una foto y el surge como un haz...
De luz pura, todo lo encuentra, todo lo une, en cierto modo...
Se puede decir que él es el tiempo.
Muchos unidos en uno solo...

Y por ello, quizás, no me daba movido.

El movimiento era imposible.
La energía se tornó en cemento inamovible.
Condesada en una potencia increíble...
Sin imagen, sin visión, solo energía incontestable...

Y temí no poder levantarme.
Quedarme así para siempre.
Como ahora estás leyendo este verso.
Baste decir que mi presagio no se cumplió.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Todo va a ir bien...

A merced do lobo. (Galego)

Y si te caes...